02 marzo 2016

Ladrones de órganos



Hace muchos años leí un relato de Ray Bradbury titulado “Trasplante obligatorio” que me impactó profundamente. Hace poco he leído otro que, en algunos aspectos, me ha recordado bastante al relato bradburiano y que también me ha impactado. Se trata de “Nuestra Señora de los Donores”, de Juan Diego Gómez Vélez, contenido en la recopilación Fabricantes de Sueños 2012 – 2013.

La narración describe una población del tercer mundo en un futuro no muy lejano en el que una determinada casta de personas están obligadas por contrato vinculante a ceder sus órganos a una corporación, a fin de que puedan beneficiarse personas ricas.

Al principio sólo deben donar órganos no vitales, como un riñón o un pulmón o los ojos, pero al final, acaban teniendo que donar algún órgano vital.

El relato es verdaderamente estremecedor, por lo realista que plantea la situación. Además, la ambientación está muy bien conseguida y no falta un cierto fervor religioso que apoya este modo de vida.

También podemos encontrar este argumento en la serie de ciencia ficción Star Trek: Voyager, en la que aparece la raza alienígena de los vidiianos, que se dedican a robar órganos de seres vivos para reemplazar sus propios órganos enfermos.

Por desgracia, no es ficción todo lo que reluce. Existe realmente un cierto mercado negro de tráfico de órganos en el mundo y este relato no hace sino poner en la palestra este increíble, pero cierto, modus vivendi de algunas personas.

Recientemente, incluso, se ha dicho que los prisioneros de Estado Islámico en Siria, son utilizados como fuente de órganos.