02 octubre 2021

Volviendo a Fermi, pero ahora con un reloj

He discutido en varias ocasiones en este blog acerca de la conocida como paradoja de Fermi que viene a decir, resumidamente, que si hay otras especies inteligentes en la galaxia (o en el Universo), ¿cómo es que no nos han contactado aún? ¿Cómo es que no están ya aquí?

 

Existe una variante interesante de esta paradoja. Si los viajes en el tiempo son posibles, ¿cómo es que no tenemos entre nosotros viajeros del tiempo? Se entiende que hablamos de viajes del futuro al pasado, porque del presente al futuro son perfectamente posibles. Solo se necesita un cohete que viaje a velocidades cercanas a las de la luz y que la radiación cósmica no achicharre a sus tripulantes.

 

¿Dónde están los turistas del futuro, dispuestos a hacerse una selfie con sus “encantadores” antepasados primitivos del siglo XXI?

 

Hay varias explicaciones para ello:

 

1)    1) Están aquí, entre nosotros, pero no los distinguimos porque se ocultan o están camuflados como “gente normal”. O tal vez nos observan con algún tipo de tecnología de camuflaje activo para no interferir en la historia de manera destacada.

2)    2) La explicación más simple: ese tipo de viajes son imposibles.

3)    3) A lo mejor solo pueden vernos, pero no pueden trasladarse físicamente.

4)    4) Una variante de lo anterior: tal vez solo pueden trasladarse en otra dimensión y nosotros no los percibimos, pero ellos a nosotros sí.

5)    5) La Humanidad en el futuro no existe.

6)    6) La Humanidad en el futuro existe, pueden viajar en el tiempo, pero está prohibido y lo respetan (poco creíble conociendo cómo somos los humanos).

7)    7) Ciertas épocas están vedadas y no pueden o no quieren acceder a ellas. Tal vez estén viajando a nuestro pasado de manera discreta, pero evitan el siglo XXI.

8)    8) Tal vez la gente del futuro no tiene el menor interés en nosotros. Tal vez han evolucionado tanto, que les somos completamente indiferentes.

 

Se me ocurren otras opciones y algunas variantes de las anteriores y muchas de ellas han sido exploradas por la ciencia ficción. Pero vamos a dejarlo aquí.

 

Yo, sinceramente, creo que no es posible viajar al pasado, porque el simple hecho de hacerlo lo alteraría de muchas maneras, más o menos drásticas y se produciría una paradoja temporal que impediría el propio viaje. Eso suponiendo que pudiese siquiera intentarse.

 

Si fuese posible hacerlo, yo creo que alguien lo intentaría y acabaría consiguiéndolo y probablemente nos enteraríamos.

 

Pero es un tema abierto y la ciencia ficción seguirá explorándolo, supongo, durante mucho, mucho tiempo.