05 diciembre 2019

Magia que va y viene


Leyendo el relato “Buena caza” (2012), contenido en la recopilación de cuentos de Ken Liu, El zoo de papel y otros relatos, nos encontramos con un mundo ligeramente ucrónico, ambientado en la China y en un Hong Kong con ciertos aires de steampunk.

Lo que más me ha llamado la atención del relato, a parte de los curiosos autómatas-humanoides que aparecen, es el clásico concepto de un mundo en el que “la magia se está retirando” en pos de las nuevas tecnologías y un mundo mucho más escéptico.

Hay muchas historias de fantasía de este tipo, aunque esta está ambientada en Oriente. El mundo mágico de espíritus y seres sobrenaturales chino es el que está desapareciendo bajo la tiranía de la industrialización y del vapor. Un poco como sucede con El Señor de los Anillos de J.R.R. Tolkien, pero en mitología oriental.

De hecho, en el relato, se le echa estrictamente la culpa al trazado del ferrocarril, que interfiere con las supuestas líneas de “chi”, de energía, del feng-shui, del territorio como causa fundamental de que los antiguos dioses dejen de hacer caso a sus acólitos y de que la magia vaya desapareciendo.

El relato contiene más cosas, desde luego. La curiosa historia de los autómatas, aunque poco creíble desde el punto de vista de la ciencia ficción, es más deudor de historias relacionadas con el Golem o con el steampunk. De hecho, el cuento es una hibridación entre ciencia ficción y fantasía, curiosamente pergeñado y que, por cierto, me recuerda a algunas historias de Eduardo Vaquerizo. Muy recomendable.