25 septiembre 2006

Sentido del humor

Hay muchas obras de ciencia ficción con sentido del humor, aunque pocas tratan sobre el sentido del humor en sí mismo. No me extraña, porque es un espinoso tema, sobre el que los psicólogos y los antropólogos no se acaban de poner de acuerdo.

¿Qué es el sentido del humor? ¿Qué hace que una cosa sea graciosa y otra no? O, incluso, ¿qué hace que algo que es gracioso en una cultura, pueda parecer insípido o de mal gusto en otra?

Es evidente que hay una componente innata en el humor, pero también hay fuertes componentes culturales que varían notablemente.

Isaac Asimov, en su relato "El chistoso" (Cuentos completos I), concluía, tras un análisis computacional muy complejo que el sentido del humor tenía un origen poco menos que extraterrestre. Por cierto que el Buen Doctor tenía una fascinación por el humor, hasta el punto de escribir varios libros de chistes y epigramas graciosos.

En "Mister Risus", de Alexsandr Beljaev (Pólux. 6 relatos de ciencia ficción rusa), un cómico profesional con mentalidad de ingeniero, es capaz de diseccionar a la perfección la magia del sentido del humor y reducirla a fórmulas que utiliza con fines prácticos, aunque con inesperadas consecuencias personales.

Para Larry Niven, en Mundo anillo, el humor es un rasgo típicamente humano y lo define como "un mecanismo de defensa interrumpida", cosa que es criticada por los alienígenas coprotagonistas (el kzinti y el titerote).

Para Kurt Vonnegut, en muchas de sus obras, el humor, incluso el humor negro es un mecanismo de liberación de la tensión reprimida, una manera de afrontar grandes desgracias o sucesos trágicos de gran embergadura.

Pero no todos los autores consideran que el sentido del humor es algo propiamente humano. Fredric Brown nos presenta en Marcianos, go home! unos hombrecillos verdes con un sentido del humor verdaderamente retorcido: gamberro, despiadado y sin escrúpulos.

En Star Trek, el personaje de Data, un androide inspirado en los robots positrónicos de Asimov, intenta acercarse más a la Humanidad tratando de reproducir el sentido del humor, con desiguales resultados.

Finalmente, me gustaría citar otra serie de TV de ciencia ficción, en este caso, The Red Dwarf (El enano rojo), en que uno de los personajes es un ordenador de a bordo -Holly- con inteligencia artificial y un peculiar sentido del humor desarrollado tras estar sólo durante siglos.